Demoliendo la casa natal de Vicente Gerbasi en Canoabo.

EL ESPACIO VACÍO

Alberto Hernandez.-

ahora llega el sol
se queda quieto sobre
la tierra viva
sobre la insistente tierra

los ojos que pasan revista
por la esquina
la que era casa
la que era sueños
voltean hacia el cielo
y se atragantan de nubes

ahora llega el silencio
el poético silencio
que habrá de silenciar
a quienes crearon el vacío

seguirá la poesía su trabajo
la imaginación su venganza
seguirán los truenos y relámpagos
seguirán el cuchillo y la amargura
de quienes ordenaron el sacrificio

y así seguirá también el sol
de Canoabo
quemando sus pupilas
revelando sus parásitos
abriendo el tiempo podrido
de sus argumentos

mientras tanto
la casa está allí
enclavada en la memoria
viva fogosa insistente
seguirá en el nombre
donde fue parido
aquel hombre
el que no dejamos de decir
y leer su sangre y sus honduras

Vicente Gerbasi
sigue en la esquina
con la mirada puesta
en los muros
en las ventanas
en la antigua puerta
por donde entraban y salían
sus tantos verbos
su innegables dones
su pasión y su eternidad